Protección de la democracia

El paquete de Defensa de la Democracia, presentado el 12 de diciembre de 2023, introduce:

• una Comunicación en la que se revisa el trabajo realizado en el marco del Plan de Acción para la Democracia Europea;
• una propuesta legislativa para establecer normas comunes de transparencia y rendición de cuentas para las actividades de representación de intereses destinadas a influir en el proceso de toma de decisiones en la Unión realizado en nombre de terceros países;
• una recomendación para promover unas elecciones libres, justas y resilientes;
• una recomendación para promover la participación de los ciudadanos y las organizaciones de la sociedad civil en la elaboración de las políticas.

Las normas comunes de transparencia tienen por objeto:

• proteger la esfera democrática de la UE;
• fomentar la confianza institucional;
• proteger el debate público abierto frente a injerencias encubiertas.

El objetivo es lograr todo lo anterior garantizando al mismo tiempo el pleno respeto de los derechos fundamentales y los valores democráticos mediante una intervención política proporcionada. Para respaldar el paquete, la Comisión también publicó los resultados de una encuesta complementaria del Eurobarómetro sobre democracia.

En 2020, la Comisión adoptó el Plan de Acción para la Democracia Europea, cuyo objetivo es construir democracias más resilientes en toda la UE mediante:

• la promoción de elecciones libres y justas;
• el refuerzo de la libertad de los medios de comunicación;
• la lucha contra la desinformación.

Otras prioridades transversales del Plan son la consecución de una participación ciudadana significativa y activa y de una sociedad civil activa. En 2023 y antes de las próximas elecciones europeas, la Comisión ha revisado el cumplimiento del Plan de Acción y ha definido varios ámbitos en los que la UE puede intervenir para abordar los problemas existentes y su naturaleza cambiante.

Descubra en este anexo cómo se ha renovado el Plan de Acción para la Democracia

La defensa de nuestra democracia europea requiere una acción decidida para proteger los procesos electorales. Esto significa mantener unas elecciones libres y justas, preservar el debate democrático abierto y actualizar las salvaguardias digitales.

Entre las acciones clave en este ámbito se incluyen:

• elaboración de legislación para garantizar una mayor transparencia en el ámbito del contenido político patrocinado («publicidad política»), acompañada de medidas de apoyo y orientación para los partidos políticos y los Estados miembros;
• la revisión del Reglamento sobre la financiación de los partidos políticos europeos;
• un nuevo mecanismo operativo conjunto para la resiliencia electoral a través de la Red Europea de Cooperación Electoral. Se trata de dotar a los Estados miembros de capacidad para que puedan hacer frente a los riesgos para las elecciones, en particular por lo que respecta a la desinformación y las amenazas cibernéticas, en estrecha cooperación con el Grupo de Cooperación para la Seguridad de las Redes y los Sistemas de Información (SRI).

La libertad y el pluralismo de los medios de comunicación son esenciales para nuestras democracias y están consagrados en la Carta de los Derechos Fundamentales. Los medios libres y plurales son fundamentales para pedir cuentas a los responsables de adoptar las decisiones y para ayudar a los ciudadanos a decidir con conocimiento de causa. Al proporcionar al público información fiable, los medios de comunicación independientes desempeñan un papel importante en la lucha contra la desinformación y la manipulación del debate democrático. Mejorar la seguridad de los periodistas, protegerlos de los abusos en la vía judicial y mejorar el panorama general del pluralismo de los medios de comunicación han sido las prioridades que han guiado la acción de la UE en este ámbito:

• En 2021, la Comisión formuló una Recomendación para reforzar la seguridad de los periodistas y otros profesionales de los medios de comunicación. Entre otras cosas, pide que se creen servicios nacionales de asistencia independientes, como servicios de ayuda, asistencia jurídica, apoyo psicológico y albergues para periodistas y demás profesionales de los medios de comunicación que reciban amenazas. Pide también mayor protección de los periodistas durante las manifestaciones, mayor seguridad en línea y un apoyo especial a las mujeres periodistas. 
• En 2022, la Comisión propuso iniciativas para mejorar la protección de los periodistas y los defensores de los derechos humanos frente a los procedimientos judiciales abusivos (demandas estratégicas contra la participación pública). La Directiva propuesta se refiere a las demandas estratégicas contra la participación pública en asuntos civiles con repercusiones transfronterizas y permite a los jueces desestimar rápidamente las demandas manifiestamente infundadas contra periodistas y defensores de los derechos humanos. También establece varias garantías procesales y vías de recurso, por ejemplo, en materia de indemnización por daños y perjuicios, así como sanciones disuasorias por la interposición de demandas abusivas. Al mismo tiempo, la Comisión ha adoptado una Recomendación complementaria para instar a los Estados miembros a adaptar su legislación a las normas de la UE que se han propuesto, de manera que se apliquen también en los asuntos nacionales y en todos los procedimientos, y no solo en Derecho civil. La Recomendación también reclama a los Estados miembros que adopten otras medidas, por ejemplo, en materia de formación y concienciación, para luchar contra las demandas estratégicas contra la participación pública.
• También en 2022, la Comisión propuso un nuevo conjunto de normas para proteger el pluralismo y la independencia de los medios de comunicación en la UE en virtud de la Ley Europea de Libertad de los Medios de Comunicación. La Ley Europea de Libertad de los Medios de Comunicación garantizará que los medios de comunicación —públicos y privados— puedan operar más fácilmente a través de las fronteras en el mercado interior de la UE, sin presiones indebidas. También tiene en cuenta la transformación digital del espacio mediático. La Comisión propuso asimismo crear un nuevo Comité Europeo de Servicios de Medios de Comunicación independiente formado por autoridades nacionales de medios de comunicación. El Comité promoverá la aplicación efectiva y coherente del marco legislativo de la UE en materia de medios de comunicación, en particular mediante la publicación de directrices sobre cuestiones reguladoras en materia de medios de comunicación.

Proteger a las democracias europeas frente a las amenazas y los efectos nocivos de la desinformación, la manipulación de la información y la injerencia, en particular por parte de agentes extranjeros, ha sido una prioridad de la UE en los últimos años. Las democracias de todo el mundo se enfrentan a la proliferación de operaciones de desinformación e injerencia extranjera, que pueden desestabilizar las instituciones democráticas y exacerbar las divisiones sociales, socavando así la confianza de los ciudadanos. Esto se ve agravado aún más por la digitalización, que permite difundir la desinformación con una velocidad y una eficiencia sin precedentes.

En el marco del Plan de Acción para la Democracia Europea, la UE ha intensificado sus esfuerzos por responder a este panorama cambiante de amenazas, tanto a nivel nacional como internacional. Esta acción se basa en la labor actual de la UE y está firmemente arraigada en los valores y principios europeos. Además, protege la libertad de expresión y el derecho de las personas a acceder a contenidos legales.

Entre las acciones clave en este ámbito se incluyen:

• el refuerzo de la cooperación, sobre la base de las redes existentes, a fin de coordinar la acción de la UE en respuesta a la creciente oleada de campañas de desinformación;
• el refuerzo del conjunto de herramientas de la UE para luchar contra la manipulación de la información y la injerencia por parte de agentes extranjeros;
• la exigencia de una mayor rendición de cuentas por parte de las plataformas en línea para evitar la propagación de desinformación, mediante un Código de Buenas Prácticas en materia de Desinformación reforzado y el establecimiento de un marco de corregulación, en consonancia con el Reglamento de Servicios Digitales.

Garantizar una mayor rendición de cuentas de las plataformas en línea

En junio de 2022, siguiendo las orientaciones adoptadas por la Comisión en 2021 sobre cómo reforzar el actual Código de Buenas Prácticas en materia de Desinformación de la UE, se firmó un nuevo Código, que reúne a las principales plataformas en línea y a las especializadas, a la industria de la publicidad en línea, a la investigación y a la sociedad civil, así como a verificadores de datos. El Código establece una amplia gama de compromisos, desde la desmonetización hasta la transparencia, pasando por el acceso a los datos. Es importante señalar que el Código va acompañado de un marco sólido de seguimiento y de un Centro de Transparencia, para garantizar una transparencia y rendición de cuentas mayores.

También establece un marco de corregulación en consonancia con el Reglamento de Servicios Digitales, que obliga a las plataformas en línea y a los motores de búsqueda de muy gran tamaño a evaluar periódicamente los riesgos sistémicos que sus servicios pueden presentar para la sociedad, incluido el riesgo de que tales servicios se utilicen indebidamente como herramienta para llevar a cabo campañas de desinformación.

El refuerzo de los vínculos entre las personas y las instituciones democráticas que las representan es la piedra angular de la resiliencia democrática. La creación de un espacio cívico para el compromiso y la participación de los ciudadanos y las organizaciones de la sociedad civil en los procesos de elaboración de políticas es una garantía esencial para la resiliencia de nuestras democracias, tanto en el contexto de las elecciones como fuera de ellas.

En el marco del Plan de Acción para la Democracia Europea, esto era una prioridad transversal. La Conferencia sobre el Futuro de Europa proporcionó una valiosa experiencia sobre cómo reforzar la participación ciudadana y dio lugar a una nueva fase de participación ciudadana con paneles europeos de ciudadanos ahora integrados en el proceso de elaboración de políticas de la Comisión Europea.

La Comisión sigue movilizando financiación específica, procedente de una amplia gama de programas de la UE, para apoyar las medidas y los objetivos del Plan de Acción para la Democracia Europea.

Algunos ejemplos de estos flujos de financiación son: 

• la promoción de la integridad electoral o el fomento de la participación ciudadana, el compromiso cívico y la confianza en la democracia, a través de la financiación del programa Ciudadanos, Igualdad, Derechos y Valores, Europa Creativa, Erasmus+, Horizonte Europa y los fondos de Cohesión;
• el refuerzo de la financiación destinada a organizaciones de medios informativos dentro y fuera de la UE, mediante financiación de Europa Creativa, Europa Digital, y el programa «Una Europa global, derechos humanos y democracia»;
• la lucha contra la desinformación con vistas a promover la alfabetización mediática y ayudar a los ciudadanos a detectar la desinformación, utilizando la financiación de Erasmus+ y del Cuerpo Europeo de Solidaridad.

Para facilitar la navegación a través de diferentes programas, la Comisión ha creado un portal de fácil acceso que funciona como una pasarela única para los fondos de la Unión y permite encontrar oportunidades de financiación relacionadas, entre otras cosas, con la democracia.

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