Europa se enfrenta a retos importantes, que van desde el aumento del coste de la vida y la escasez de vivienda hasta la gestión de las empresas y la migración. Estos retos se ven aún más intensificados por cambios más amplios de naturaleza social, medioambiental, económica y de seguridad.
En respuesta, la Comisión Europea ha fijado objetivos ambiciosos para 2024-2029 y más adelante, guiados por siete prioridades clave. Estos objetivos están diseñados para crear una Unión más rápida, sencilla y unida que apoye a sus ciudadanos y empresas, adopte medidas decisivas en los ámbitos en que los pueda conseguir un mayor impacto y promueva las ambiciones comunes.
Esta visión se basa en la capacidad demostrada de la Unión Europea para hacer frente a retos complejos a través de la acción colectiva. Al convertir los planes en soluciones concretas, la Comisión se compromete a garantizar un futuro resiliente y próspero para todos los europeos.

Europa como continente de crecimiento económico, de empresas y de innovación, que garantiza la competitividad, la prosperidad y la equidad.

Responder a los retos europeos en materia de seguridad y defensa y mejorar la preparación y la gestión de crisis.

Promover la justicia social, aumentar la solidaridad en nuestra sociedad y garantizar la igualdad de oportunidades para todos.

Construir un sistema agrícola y alimentario competitivo y resiliente, salvaguardar la biodiversidad y prepararnos para el cambio climático.

Situar a los ciudadanos en el centro de nuestra democracia para que todos puedan ayudar a configurar el futuro de nuestra Unión Europea.

Centrarnos en nuestra gran vecindad para hacer frente a los retos mundiales y promover la paz, las asociaciones y la estabilidad económica.

Un presupuesto de la UE moderno y reforzado, y un programa de reformas ambicioso para alcanzar nuestros objetivos.