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Transporte durante la pandemia

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Aviación

Durante la pandemia de COVID-19, el tráfico aéreo disminuyó significativamente en Europa. A fin de contribuir a paliar el impacto de la pandemia en el sector, la Comisión Europea presentó rápidamente legislación específica para eximir temporalmente a las compañías aéreas de sus obligaciones en lo que respecta a la utilización de las franjas horarias aeroportuarias con arreglo al Derecho de la Unión (la denominada norma «se usa o se pierde»), mediante la modificación del Reglamento de la UE sobre las franjas horarias en repetidas ocasiones entre abril de 2020 y octubre de 2022.

El 1 de abril de 2020, la Comisión autorizó que las franjas horarias asignadas entre el 23 de enero y el 29 de febrero de 2020 se consideraran utilizadas, a fin de evitar que las compañías aéreas perdieran sus franjas horarias. Esta excepción estuvo en vigor hasta el 24 de octubre de 2020.

El 14 de octubre de 2020, la Comisión adoptó una prórroga, hasta el 27 de marzo de 2021, de la excepción de las normas de la UE sobre el uso de franjas horarias aeroportuarias para cubrir la totalidad de la temporada de invierno. Esta medida se introdujo para que las compañías aéreas pudieran planificar sus horarios de vuelo sin temor a perder sus franjas horarias como consecuencia de la drástica reducción del número total de vuelos.

El 15 de febrero de 2021, una nueva modificación del Reglamento sobre las franjas horarias permitió a las compañías aéreas devolver hasta la mitad de las franjas horarias asignadas antes del inicio de la temporada. Las compañías aéreas estaban obligadas a utilizar al menos el 50 % de sus franjas horarias restantes y podían quedar exentas de este umbral si sus rutas se veían afectadas por medidas aplicadas para mitigar la pandemia. Así pues, la excepción de la norma «se usa o se pierde» se prorrogó por un nuevo período comprendido entre el 28 de marzo y el 30 de octubre de 2021.

El 23 de julio de 2021, otra modificación introdujo una tasa revisada de utilización de franjas horarias para el período de programación de invierno 2021-2022, en vigor hasta el 29 de octubre de 2022. Esta tasa se fijó en el 50 % para garantizar una conectividad fiable para el invierno y con el fin de permitir que el mercado se adaptase gradualmente a la evolución de la demanda y desbloquease la capacidad para el período de programación de invierno 2022-2023.

En octubre de 2022, la Comisión dispuso una nueva prórroga de las normas temporales sobre asignación de franjas horarias y estableció al mismo tiempo requisitos para que las compañías aéreas liberaran la capacidad no utilizada. El Reglamento supuso un restablecimiento del requisito del 80 % de utilización de franjas horarias, complementado con una flexibilización específica del uso de franjas horarias en casos de no utilización justificada de las mismas. Este Reglamento se encuentra actualmente en vigor.

Para aliviar la presión financiera sobre los operadores aéreos y los servicios de asistencia en tierra, en mayo de 2020 la Comisión adoptó normas por las que se modificaban partes del Reglamento sobre servicios aéreos. Algunas de estas disposiciones temporales, en particular la excepción a la suspensión o revocación de la licencia de explotación de las compañías aéreas, se prorrogaron hasta el 31 de diciembre de 2021. Estas medidas temporales ya no están en vigor.

Transporte por carretera

Durante la pandemia, la Comisión adoptó dos Comunicaciones en las que se exponían los objetivos y la puesta en marcha de los «carriles verdes»: pasos fronterizos abiertos a todos los vehículos de carga que transporten mercancías, en los que los controles y la inspección sanitaria no deben durar más de 15 minutos.

La Comunicación sobre los carriles verdes, de 23 de marzo de 2020, introdujo tanto medidas temporales, como la exención de las restricciones al acceso por carretera y de las restricciones al desplazamiento para los trabajadores del transporte que estaban en vigor en los Estados miembros, como principios generales que se incorporaron a las nuevas medidas de la Comisión, en particular el concepto de los «carriles verdes».

En consonancia con las Conclusiones del Consejo sobre un plan de contingencia destinado al transporte de mercancías, de 23 de octubre de 2020, la Comisión adoptó la Comunicación sobre la mejora de los corredores verdes de transporte (COM/2020/685), que establece la referencia para los elementos urgentes de un plan de contingencia y refuerza algunos principios de la Comunicación sobre los carriles verdes.

El 23 de mayo de 2022, la Comisión adoptó la Comunicación sobre un plan de contingencia para el transporte (COM/2021/211), en la que se presenta un conjunto de instrumentos para responder a cualquier tipo de crisis de transporte, sobre la base de la experiencia adquirida durante la pandemia de COVID-19.

Transporte ferroviario

A raíz de la propuesta de la Comisión, el 7 de octubre de 2020 se adoptó el Reglamento (UE) 2020/1429 del Parlamento Europeo y del Consejo para contrarrestar el impacto económico negativo de la pandemia de COVID-19 en las empresas ferroviarias. El Reglamento permitía a los Estados miembros autorizar a los administradores de infraestructuras a proceder a la reducción, la exención o el aplazamiento del pago de los cánones de acceso a las vías.

El período de referencia del Reglamento se fijó inicialmente entre el 1 de marzo y el 31 de diciembre de 2020, pero la Comisión estaba facultada para adoptar actos delegados con el objetivo de prorrogar dicho período más allá de esa fecha.

Debido al persistente impacto negativo de la pandemia en el transporte ferroviario, el período de referencia se prorrogó cuatro veces, hasta el 31 de diciembre de 2022.

Sobre la base de un análisis en profundidad de los datos recopilados acerca de los niveles de tráfico en la red ferroviaria de la UE, que mostraba que la pandemia de COVID-19 ya no causaba en gran medida un efecto negativo directo en los servicios ferroviarios, la Comisión decidió abstenerse de prorrogar el período de referencia más allá de esa fecha.

Transporte marítimo

Durante la pandemia de coronavirus, la Comisión publicó directrices para apoyar a los pasajeros de buques de crucero y a las tripulaciones de buques de carga y de pasajeros. Estas directrices ofrecían recomendaciones sobre la salud, la repatriación y las disposiciones de viaje. En esas recomendaciones también se invitaba a los Estados miembros a permitir cambios de tripulación y a crear una red de puertos donde esos cambios pudieran realizarse rápidamente. La Comisión también coordinó las medidas adoptadas por los Estados miembros durante las reuniones periódicas de los directores marítimos de la UE y puso en marcha las Orientaciones de la UE para las Operaciones de los Buques de Crucero en el Marco de la COVID-19 [COVID19 - EU Guidance for Cruise Ship Operations, documento en inglés] de la Agencia Europea de Seguridad Marítima con el fin de permitir una reanudación segura de las operaciones.

Garantizar el traslado de residuos en toda la UE

El 31 de marzo de 2020, la Comisión publicó orientaciones con el objetivo de garantizar la adopción en la UE de un enfoque común para asegurar la continuación de los traslados de residuos a través de los corredores verdes, manteniendo al mismo tiempo un elevado nivel de protección de la salud pública y del medio ambiente.

Aviso: esta página se actualizó por última vez en septiembre de 2023.